26/6/07

Los mercadillos de la vida 2ª parte




Después de toda la emoción que tenía yo por ir al Portobello madrileño, me quedé totalmente frustrada. Un río de gente intentando andar, precios prohibitivos, cosas que perfectamente las podría comprar aquí en cualquier tienda de Chueca, camisetas a 50€ y auténticas falsificaciones de FISH & CHIPS a 8€ el plato, ¿ Dónde está ese papel de estrasa grasiento de toda la vida?.
La mala organización como siempre ha sido la guinda del evento, la Plaza de la Paja es demasiado pequeña para eso. Bobys y Beefeaters Made in Spain (¿el saber estar y la buena educación de los de allá no se puede importar?) custodiando una entrada por dónde no pasaba nadie, ni la policía local tenía acceso, solo dejaban salir y la gente se agolpaba y empujaba como si la mismísima Lady Di hubiera aparecido en uno de los puestos, o, como suele pasar cuando regalan algo, como puede ser un cutre abanico de papel. Si, si, algunas filas eran para eso...
En fin, yo, la más gilipollas del reino acudí en familia, intentando andar 15cm con un cochecito, un bebe enfadado, un marido y 30 grados a la sombra.
La próxima vez me pillo un vuelo low cost y me piro a Londres, seguramente me saldrá más barato.

Aquí las fotos del evento, me tuve que subir a un árbol para poder ver algo.

3 comentarios:

Ros dijo...

calla calla que horror, con ese calor que hacía y encima media hora para pillar algo de comida... en fin,q ue acabamos en la fnac no te digó más...

Anónimo dijo...

No suelo dejar ningún comentario en los blog que visito, por pereza o vete tu a saber porqué, pero hija de mi vida, en este caso no me pude resistir. Que tienes un blog del que te puedes sentir bien orgullosa, como de un hijo vamos, que encima que tiene un diseño muy chulo, y es interesante puedes escuchar buena música.
Que coño, te mereces no menos de 200 comentarios diarios.
Pasaré a visitarte, seguro que sí.

Ipodificada dijo...

Halo, yo acabé en la plaza mayor corriendo detrás de las palomas, y de paso nos tomamos unas sidrinas en los puestos que había en la feria gastronómica.

Susi, gracias, gracias y gracias, pásate cuando quieras, te dejo la radio puesta.