Fit

La publicidad en Brasil (agencias y creadores) siempre se ha clasificado entre unas de las mejores del mundo pero a veces como en todas partes, meten la pata, aquí un ejemplo de una campaña bien hecha pero sexista y que puede influir en las mentes poco maduras de las adolescentes, fomentando la anorexia y la bulimia. Todo sería perfecto si no fuera por el slogan elegido por esa marca para promocionar su yogourt light.

" Olvídalo, el gusto de los hombres nunca cambiará"

Yo creo que el gusto es como el culo, cada uno tiene el suyo y que están muy buenas las chicas éstas, seguro que no le pasa lo mismo al fit light este que no debe saber a nada, porque eso es una de las primeras reglas de una dieta: Si sabe ha algo y está bueno... engorda.
El gusto cambia, o sino, nos podemos trasladar al cine de los 40', 50' y 60' donde las mujeres con curvas eran las mujeres más codiciadas por los hombres. Marilyn Monroe, Sophia Loren, Rita Hayworth por poner ejemplos.
No estoy de acuerdo con el mundo Lollypop que algunas revistas, películas y anuncios nos quieren proponer como modelos ideales a seguir y es que las chicas Lollypop, no hay por donde cogerlas, no tienen chicha ni ná de ná.
Me pone de los nervios estos anuncios en que una tía esquelética lucha con un pantalón de la talla 32 que no le cierra, y que por desayunar y cenar Special K durante 15 días, por arte de magia ya le entran. O estas que se echan cremas anticelulítica en piernas cuyo índice de masa corporal es el mismo que el de una codorniz. ¡ Qué mal repartida está la celulítis en este mundo!
Y lo peor es que hay personas como yo, que caen en la tentación de hacer esa dieta ridícula, hasta que te das cuenta que los Frosties con menos azúcar, tienen las mismas calorías que el Special K de las narices, y está más bueno dónde va a parar. Y esos brebajes absorbe grasas que parecen que te van a limpiar por dentro como el KH7 las cocinas, que si os ponéis a pensar, todos ahora han descubierto el té verde, ahora todo lleva té verde, hasta la cerveza la han sacado con un toque de té verde, té verde, té verde... eh, es que el Puh-er o té rojo es más difícil de combinar con cualquier cosa, ya lo explotarán , todo tiene su tiempo.
Incongruencias de la vida, mientras muchos millones de personas en el mundo se mueren por no tener nada que comer, otros tantos millones de personas prefieren no comer.
Lo que hay que hacer es la dieta del cucurucho. ¡ Ayyy, qué tiempos aquellos !
Pero sobretodo es que una se sienta sana y sexy, pese lo que pese y mida lo que mida.

Tengo hambre y agujetas, pero resisto y me aguanto, he pasado delante del Starbucks y no me he tomado un Frapuccino, a todo esto, rodeada de famosos en el Village de Las Rozas, en una superfiestuki del Café del Mar Community.

¡ PRUEBA SUPERADA !